La primera noche en la nueva casa nos sienta muy bien. Desayunamos en la cocina, por fin sentadas en sillas frente a una mesa, qué ganas tenía.
Me bajo con Carol en la 23 y voy caminando hasta la 17, el paseo por la mañana despeja. Tengo pedida hora en la sala de edición a las nueve y media. Aline está también. Le doy bastante el coñazo, ella maneja muy bien el programa y yo soy una novata que discute con los ceros y los unos, siempre he necesitado traductor para hablarle al ordenador.
El telecine es aún más espeluznante de lo que esperaba, aunque esté rodado en blanco y negro la imagen es roja y verde, tengo a medio desierto bailando dentro del fotograma y los pelos se multiplican más que en una peluquería, pero en fin, es lo que hay.
Me entretengo un rato, simplifico aún más lo que ya era simple en el rodaje y me queda algo, no sé muy bien cómo llamarlo, de 53 segundos, aún dudo si cambiar un plano por otro. En fin, blanco y negro, lleno de pelusas, mudo, rodado en unas dos horas y montado y etalonado (que la verdad, es a lo que le dediqué más tiempo) en unas tres horas y media... en resumen aquí os dejo mi primera patatilla en los new yorks. No seáis muy malos.
La cabeza se me hincha cuando tengo que estar mucho rato mirando una pantalla en una habitación oscura y antiventilada. Al salir a la calle y recordar que es de día nos inunda la felicidad. Caminamos con la NFT (Not for Tourist Guide) de Aline en la mano. Es una guía muy, muy recomendable, hay edición de New York, que realmente sólo tiene Manhattan y Williamsburg, edición de Brooklyn y edición de Queens.
Acabamos en un restaurante indio vegeteranio de buffet libre en Lexington Av con la 27, creo recordar. Por 8 dólares disfrutamos de un momento de paz, a veces picante, de deliciosas verduras, pitas, sopas, salsas de coco... todo amenizado por una envolvente charla en torno al mundo del documental. El reloj nos devuelve a la realidad y a la clase de edición. Hoy nos confiesan que los rusos existieron, no está mal, les ha costado un par de semanas. Vemos un trozo de "Requiem for a dream" y me vuelvo a enamorar de Coney Island.
no es ninguna patatilla es sencillo e inteligente!
ResponderEliminarRaquel dale importancia a tu trabajo es original,acertado y tiene mucha frescura
ResponderEliminarbesazos
El corto es precioso. Impresionante poder contar historias tan bonitas en tan poco tiempo, sin diálogo, en un par de planos...lo que yo diga, una profesional como la copa de un pino. Que suerte haberme cruzado en este camino...
ResponderEliminarprecioso!!
ResponderEliminarMe ha parecido una verdadera pasada Raquel. Preséntalo a los Goya por favor. Vas a ser famosa!!!!
ResponderEliminarFeliz Año Nuevo.
Besines
Blanca (desde el ordenador de la madre)
muy dulce y sensible! tras esto, que se quiten Porter, Lumiére y hasta Meliés!!
ResponderEliminarQué pasada trabajar con peli, eh? es tan auténtico que hasta se le pone cara de antigua a la actriz.
Un besote gordo!
minimalista...y GRANDE!
ResponderEliminarse me saltan los colores!!! mil gracias por vuestro apoyo... espero que no subáis las expectativas para el siguiente que ya no sé si voy a ser capaz de cubrirlas.
ResponderEliminarmillones de besos a repartir
hola soy mercedes me ha parecido una belleza, se lo voy a enseñar al abuelo que se va a poner muy contento.
ResponderEliminarTe quiero y por cierto espero que me contrates para alguna de tus películas.
QUE TERNURA................
ResponderEliminarMARIO
guapa, cuando los que han puesto comentarios vean tu corto lo vana flipar -eso si tus amigo hacen el talonaje ese ;-)
ResponderEliminarBesos grandes desde Madrid, en Enero estaré en San Francisco 4 días, pero nos pilla en la otra costa...
Beso para Carol also
Jesús
ARTISTA!
ResponderEliminarNeni, ¿como puedo verlo?... creo que he llegado tarde y ya no está colgado... joooo, tengo mucha curiosidad!! me lo pasas? porfa! jajajaja
ResponderEliminarBeth tienes que hacer clic encima de la palabra aqui y te lleva directa al enlace de vimeo.
ResponderEliminarBesos